El Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) han aprobado un préstamo conjunto de $620 millones para El Salvador, con el objetivo de fortalecer su sistema de salud pública y respaldar reformas esenciales para garantizar la sostenibilidad macroeconómica y fiscal del país.
De este paquete, $120 millones provienen del Banco Mundial y se destinarán a mejorar la infraestructura sanitaria y los servicios médicos en el país durante un período de cinco años.
El proyecto tiene como prioridad la modernización de la infraestructura de salud, la adquisición de nuevos equipos, la expansión de servicios personalizados, la digitalización de los mismos y el fortalecimiento de las redes de salud.
En palabras de Carine Clert, gerente de país del Banco Mundial para El Salvador y Costa Rica, este financiamiento representa «una oportunidad única para transformar el sistema de salud en El Salvador». La ejecución del proyecto se llevará a cabo en colaboración estrecha con el Ministerio de Salud.
Por otro lado, el BID ha aprobado una operación de mayor envergadura, con un monto de $500 millones.
Este financiamiento está diseñado para respaldar las reformas fiscales y económicas que el gobierno salvadoreño necesita implementar, dentro del marco del programa de asistencia del Fondo Monetario Internacional (FMI), que fue aprobado en febrero pasado por un total de $1,400 millones.
El BID destacó que estos fondos otorgarán espacio fiscal al gobierno del presidente Nayib Bukele para continuar con las reformas que buscan incrementar los ingresos tributarios, reducir la deuda pública y fortalecer las reservas internacionales, además de mejorar la gobernanza y la transparencia financiera.
Ambas entidades, el BID y el Banco Mundial, forman parte de un esquema de apoyo conjunto que incluye un desembolso de hasta $3,500 millones para El Salvador, en el marco del programa de asistencia del FMI, que tiene una duración de 40 meses. En este contexto, el gobierno de Bukele se ha comprometido a reducir su intervención en el ecosistema de bitcoin y a implementar un ajuste fiscal equivalente al 3.5 % del Producto Interno Bruto (PIB).
Este ajuste fiscal, que se llevará a cabo en un plazo de tres años, comenzará en 2025 con una reducción de 1.5 %, lo que implicará fuertes recortes en el gasto público y un aumento en la base de contribuyentes.

Las exportaciones vía aérea registraron un crecimiento interanual del 7.2 % en enero de 2025, de acuerdo con datos de la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA).
Según el informe más reciente de la institución, divulgado en febrero, en el primer mes del año se movilizaron 1.4 millones de kilogramos de bienes a través del Aeropuerto Internacional de El Salvador San Óscar Arnulfo Romero y Galdámez.
Esta cifra representa un incremento de 99,359 kilogramos en comparación con los 1.3 millones registrados en el mismo periodo de 2024.
El aeropuerto de Ilopango, por su parte, no reportó exportaciones aéreas en enero, concentrando sus operaciones en el transporte de 830 pasajeros y el manejo de 6,188 aeronaves.
Este incremento consolida a enero de 2025 como el mes con mayor volumen de exportaciones aéreas en los últimos cuatro años, desde que en 2021 se registraron 2.2 millones de kilogramos. Posteriormente, los envíos disminuyeron a 1.3 millones en 2022, alcanzaron un millón en 2023 y se recuperaron a 1.3 millones en 2024.

Industria electrónica impulsa envíos

Jorge Arriaza, presidente de la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI), señaló que el sector electrónico es el principal usuario de la terminal aérea para exportaciones. Sin embargo, destacó que este tipo de envíos suelen ser más costosos en comparación con el transporte marítimo o terrestre.
“Es necesario evaluar si el costo del transporte vía aérea resulta mayor en comparación con las condiciones del puerto, especialmente considerando la saturación en Acajutla”, explicó Arriaza.
Además, indicó que ciertos materiales, como graneles e insumos para la construcción, no pueden ser movilizados por avión.

Importaciones y flujo de pasajeros también al alza
Las importaciones aéreas también mostraron un crecimiento significativo, pasando de 1.1 millones de kilogramos en enero de 2024 a 1.5 millones en 2025, lo que representa un incremento del 29.7 %.
En cuanto al movimiento de pasajeros, CEPA informó que en enero de 2025 se registró un leve aumento del 0.2 %, con 493,677 personas movilizadas frente a las 492,776 del mismo mes del año anterior.
De estos, 206,171 salieron del país, 183,944 ingresaron y 99,443 fueron pasajeros en transbordo.
Además, 4,119 personas fueron catalogadas como en tránsito.

Con información de diario El Mundo

El director de Asuntos Económicos de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), Waldo Jiménez, analizó el crecimiento del sector de microfinanzas y las oportunidades económicas para las pequeñas y medianas empresas (pymes) en El Salvador.
Jiménez destacó que el sector de microfinanzas ha crecido significativamente en el último periodo, lo que ha permitido un mayor acceso a crédito para emprendedores y pequeñas empresas.
Sin embargo, advirtió que las necesidades de las pymes siguen siendo mucho mayores y requieren estrategias adicionales para su desarrollo.

Identificación de oportunidades en un entorno económico desafiante
El representante de ANEP destacó la importancia de identificar oportunidades en medio de las dificultades económicas y comerciales a nivel internacional.
“Para las empresas en El Salvador y en Centroamérica también hay que identificar oportunidades, porque, hay una frase popular: ‘De perdida ganada’. Entonces tenemos que encontrar cuáles son las oportunidades, porque El Salvador es una economía pequeña que no va a poder cambiar lo que está sucediendo en el entorno internacional”, explicó Jiménez.
Uno de los temas que preocupa al sector empresarial es la situación de los aranceles en Estados Unidos, un factor clave en el comercio exterior salvadoreño.
Ante esto, el director de Asuntos Económicos de ANEP insistió en la necesidad de adaptar estrategias que permitan a las empresas salvadoreñas mantener su competitividad.

ENADE 2025: Claves para el crecimiento empresarial
Jiménez también adelantó que en la próxima edición del Encuentro Nacional de la Empresa Privada (ENADE) 2025, el 31 de marzo, se abordará el tema del aprovechamiento de oportunidades por parte de las empresas salvadoreñas.
Este evento reunirá a actores clave del sector económico y empresarial para analizar estrategias que permitan impulsar el desarrollo y la inversión en el país.
Con estos análisis, dijo, la ANEP busca contribuir a la identificación de soluciones para el sector productivo de El Salvador, en un contexto económico desafiante pero con potencial de crecimiento.

El comercio digital en El Salvador continúa mostrando un crecimiento significativo, alcanzando un 22 % del total de las transacciones comerciales en el país, según datos del Comité de Tecnología de la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador (Camarasal). 

Este crecimiento, impulsado por la demanda de los consumidores por herramientas más accesibles y modernas, refleja una transformación gradual en el panorama comercial nacional.

Jaime García, presidente del Comité de Tecnología de Camarasal, destacó en una entrevista televisiva que la digitalización del comercio en el país es una tendencia en ascenso, impulsada tanto por las empresas como por los consumidores que buscan comodidad y rapidez en sus transacciones. A medida que la adopción de tecnologías crece, las empresas se ven obligadas a innovar para mantenerse competitivas y satisfacer las expectativas de los consumidores.

A pesar del avance en el comercio digital, García señaló que aún existe una barrera significativa entre los consumidores, ya que una parte de la población sigue prefiriendo las transacciones físicas. 

“Cuatro de cada diez adultos todavía sienten temor a realizar compras o transacciones en línea y optan por el método tradicional», explicó durante una entrevista en Diálogo 21. 

Este fenómeno se debe en gran parte a la falta de confianza y el desconocimiento sobre cómo operar de manera segura en el entorno digital.

El temor a las plataformas tecnológicas no es exclusivo de los consumidores, ya que también afecta a las pequeñas y medianas empresas (mypes). Una encuesta realizada el año pasado por la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), cofinanciada por la Unión Europea, reveló que, aunque un 85 % de los emprendimientos tiene presencia en Facebook, solo un 65 % logra concretar ventas a través de esta red. 

En las microempresas, la cifra es aún más baja, con un 87% manteniendo una página en Facebook, pero solo un 61 % realizando ventas.

A raíz de esta situación, la preocupación por la ciberseguridad se ha convertido en un tema prioritario. 

Yesenia Salas, directora de asuntos técnicos de Camarasal, recordó que la pandemia aceleró la adopción del comercio electrónico, pero también planteó nuevos retos relacionados con la protección de datos. «La seguridad digital es tan crucial como la seguridad física hoy en día», subrayó Salas.

De acuerdo con García, los ciberataques son cada vez más frecuentes, con un ataque ocurriendo cada 30 segundos en todo el mundo, y aproximadamente el 50 % de estos incidentes afectan a pequeñas empresas. 

La Cámara de Comercio advirtió que los costos de estos ciberataques pueden ser devastadores, no solo en términos de dinero, sino también por la pérdida de información valiosa que puede comprometer la operación de una empresa.

Para abordar estos riesgos, Camarasal organizó recientemente un evento denominado Cyberweek, donde expertos nacionales e internacionales discutieron sobre la protección contra hackers y las mejores prácticas para defenderse en el mundo digital. La jornada fue una oportunidad para concienciar a las empresas sobre la importancia de implementar medidas de seguridad efectivas en sus plataformas digitales, a fin de proteger tanto sus negocios como a sus clientes.

La transición hacia un comercio más digitalizado en El Salvador sigue siendo un proceso en marcha, pero con la integración de tecnología y mejores prácticas de seguridad, se espera que este sector siga creciendo de manera sostenible en los próximos años.

Con información de diario El Mundo

El sector asegurador salvadoreño está viviendo una etapa de transformación, impulsada por un entorno económico en crecimiento y un dinamismo cada vez más notorio en los seguros de daños y salud. Según el informe “Análisis del Sector Seguros de El Salvador: Situación actual y Perspectivas 2025” de Moody’s Local, se espera que el sector crezca cerca del 7 %este año, favorecido por el impulso económico de sectores como la construcción, comercio y financiero.

Este optimismo se destacó en el evento “Central America Insights: El Salvador 2025: Explorando Tendencias Financieras y Perspectivas Estratégicas”, organizado por Moody’s Local, en el cual se analizó el futuro de la industria aseguradora salvadoreña. En dicho foro participaron Jazmín Roque, Associate Director Credit Analyst de Moody’s Local, y Enzo Bizzarro, Presidente Ejecutivo de Asesuisa, quienes discutieron las principales tendencias y retos que enfrenta este sector en el país.

Moody’s Local destaca que, aunque la penetración de los seguros en El Salvador es considerablemente alta comparada con otros países de la región, aún existe un amplio espacio para su expansión.

Jazmín Roque subrayó que un crecimiento adicional podría lograrse mediante un mayor acceso a productos de seguros, impulsado por una penetración bancaria más profunda y regulaciones que fomenten la adopción de seguros de vida con ahorro y previsión.

El presidente ejecutivo de Asesuisa, Enzo Bizzarro, refirió que la penetración de seguros en El Salvador está más desarrollada en grandes empresas, con casi un 100 % de cobertura, pero que en segmentos como las pequeñas y medianas empresas, y especialmente en los individuos, esta penetración es muy baja, llegando a apenas un 10 %.

“El desarrollo de nuevos productos y el uso de plataformas digitales son clave para acceder a estos mercados desatendidos y permitir que más salvadoreños cuenten con una protección adecuada”, señaló Bizzarro.

Uno de los mayores retos para el sector sigue siendo la falta de educación financiera y la conciencia sobre la importancia de los seguros. 

A pesar de los avances, una gran parte de la población aún no percibe el seguro como una necesidad. 

La accesibilidad y asequibilidad de los productos siguen siendo barreras que impiden un mayor crecimiento, especialmente en los segmentos más vulnerables.

La tecnología se presenta como una de las claves para superar estos obstáculos. El uso de la inteligencia artificial y el análisis de grandes volúmenes de datos (big data) permitirá personalizar los productos de seguros, optimizando así la oferta y facilitando su adopción en diversos segmentos del mercado.

En cuanto a los desafíos externos, la exposición del país a riesgos hidrometeorológicos ha sido una preocupación constante, dado que estos eventos naturales podrían generar afectaciones en el sector asegurador. 

Sin embargo, Bizzarro explicó que la estabilización del mercado y la capacidad de las aseguradoras para adaptarse han permitido que el sector se mantenga resiliente ante situaciones catastróficas. 

La sólida capacidad de capital y los rendimientos favorables también han contribuido a mitigar los efectos de eventos climáticos extremos.

A nivel regional, el seguro de automotor sigue siendo el ramo predominante en la industria, representando alrededor del 40% del total de primas en la región, según datos de SwissRe Institute. 

Esto coloca al seguro de automotor como el principal sector dentro del mercado de seguros en Centroamérica.

A pesar de los retos, el sector asegurador de El Salvador muestra señales de crecimiento y estabilidad, con un futuro prometedor para los próximos años. Empresas como Asesuisa, con 55 años de trayectoria, continúan liderando el mercado, ofreciendo soluciones de protección que se adaptan a las necesidades de los salvadoreños.