El Salvador experimentó un significativo descenso en la inversión extranjera directa (IED) neta durante el segundo trimestre de 2024, cerrando en negativo por primera vez desde finales de 2022, según datos confirmados por el Banco Central de Reserva (BCR).

La IED neta alcanzó -$11.16 millones, lo que indica que la salida de capital superó los ingresos, en contraposición a los $188.49 millones reportados en el primer trimestre.

Este fenómeno ha llamado la atención de economistas y organismos multilaterales, dado que una cifra negativa es un indicador de desinversión.

En términos sectoriales, las actividades de servicios financieros, excluyendo seguros y fondos de pensiones, fueron las que atrajeron el mayor volumen de inversión, con un total de $48.03 millones.

Otros sectores que recibieron inversiones incluyen el suministro de electricidad con $30.54 millones y el sector de seguros y fondos de pensiones con $24.78 millones.

No obstante, estas entradas no lograron contrarrestar las salidas de capital en áreas críticas como el comercio al por menor, que sufrió una fuga de $118.13 millones, así como actividades inmobiliarias con $22.28 millones y otros sectores productivos.

En cuanto a los países de origen de la inversión, España lideró con $105.62 millones, seguido por Estados Unidos con $53.48 millones y Colombia con $40.16 millones. Las mayores salidas de capital se registraron hacia Panamá, totalizando $126.95 millones, y se reportaron también significativas transferencias a Guatemala, Francia, Reino Unido, México, Japón y Hong Kong.

El recién nombrado presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de El Salvador, Henry Mejía, se reunió con el embajador de Estados Unidos en el país, William Duncan, para discutir nuevas áreas de colaboración.

En este encuentro, se abordaron temas como la violencia de género, el fortalecimiento del sistema judicial salvadoreño y la protección de grupos vulnerables.

Mejía destacó la importancia de estas reuniones y el deseo de la Corte de estrechar lazos de amistad con Estados Unidos.

“Agradecemos enormemente la cooperación de Estados Unidos en proyectos de reforma judicial y en la promoción de la lucha contra la violencia hacia las mujeres. Queremos fortalecer los lazos de amistad y cooperación entre nuestras naciones”, afirmó.

La CSJ subrayó, a través de su sitio oficial, que estos encuentros sentarán las bases para una cooperación más estrecha en el futuro. Tras la reunión, el embajador Duncan expresó su compromiso de colaborar con el sistema judicial salvadoreño para proteger a los más vulnerables.

“Estados Unidos está dispuesto a apoyar los esfuerzos de El Salvador para fortalecer este pilar de la sociedad”, concluyó.

El próximo 16 de octubre, la Cumbre de la Industria reunirá a líderes, expertos y profesionales de diversos sectores para discutir temas de vital importancia para el ámbito empresarial y económico.

Este evento, Organizado por la Asociación Salvadoreña de Industriales, se ha consolidado como un referente, se centrará en ejes fundamentales como la innovación tecnológica, la sostenibilidad, la economía global y las tendencias emergentes en la industria.

Históricamente, las empresas han sido motores del progreso, impulsando el desarrollo y mejorando la calidad de vida. La cumbre ofrecerá paneles y conferencias donde expertos analizarán los desafíos y oportunidades actuales, promoviendo la colaboración y la creación de alianzas estratégicas.

En un mundo en constante cambio, este encuentro se presenta como una plataforma esencial para forjar el camino hacia un futuro mejor.

Los ponentes de esta edición serán Bruce Mac, Luis Maturen, Thony Da Silva Romero,
Francisco Alberto Lima, secretario SIECA y la ministra de Economía de El Salvador, María Luisa Hayem.

Después de una ausencia de ocho años, los Cuerpos de Paz regresan al país con la llegada de nueve voluntarios estadounidenses que apoyarán diversos proyectos comunitarios.

Jaime Kuklinski, director de los Cuerpos de Paz en El Salvador, hizo el anuncio esta tarde en la Embajada de Estados Unidos, destacando que los voluntarios trabajarán en áreas como salud pública, agricultura, desarrollo económico y juvenil.

El embajador William Duncan subrayó la importancia del acuerdo firmado el año pasado, que permitió reanudar las operaciones tras la suspensión en 2016, motivada por la inseguridad en el país. Carol Spahn, directora global de los Cuerpos de Paz, afirmó que este regreso representa un hito significativo en las relaciones bilaterales entre ambos países.

Los Cuerpos de Paz de Estados Unidos fueron fundados en 1961 por el presidente John F. Kennedy con el objetivo de promover la paz y la amistad a través del servicio internacional.

Desde su creación, más de 240,000 voluntarios han trabajado en 142 países, abordando diversas necesidades en áreas como educación, salud y desarrollo comunitario.

La organización se ha convertido en un símbolo del compromiso estadounidense con el desarrollo sostenible y la cooperación internacional.
La función principal de los Cuerpos de Paz es enviar voluntarios a comunidades necesitadas para colaborar en proyectos que mejoren la calidad de vida.

Los voluntarios trabajan codo a codo con los habitantes locales, fomentando el intercambio cultural y la capacitación en habilidades que impulsan el desarrollo económico y social.

Además, la organización busca fortalecer las relaciones entre Estados Unidos y los países anfitriones, contribuyendo a un entendimiento mutuo y a la construcción de sociedades más resilientes.

Una reciente encuesta realizada por CID Gallup revela que el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, goza de una aprobación del 89% entre la población, destacando su popularidad al inicio de su segundo mandato, que comenzó el pasado 1 de junio.

Este apoyo abrumador abarca diversos segmentos de la sociedad, evidenciando una amplia aceptación de su gestión.
Los datos de la encuesta, realizada en septiembre de 2024, muestran que la aprobación de Bukele se mantiene alta sin distinción de nivel educativo ni religión.

Entre los encuestados con educación secundaria, el apoyo alcanza un 92%, mientras que los que poseen educación primaria lo respaldan con un 88%.
Por su parte, los ciudadanos con educación superior muestran un apoyo del 87%.

En términos religiosos, los evangélicos manifiestan un apoyo del 92%, y los católicos un 85%.
La encuesta se llevó a cabo mediante entrevistas cara a cara a una muestra de 1,200 personas, con un margen de error de 2.8% y un nivel de confianza del 95%.

Los altos índices de popularidad de Bukele, de 43 años, son atribuibles en gran parte a su efectiva política de seguridad y a su enfoque en la lucha contra las pandillas, lo que ha resonado positivamente en un país que ha lidiado con altos niveles de violencia.

Históricamente, la figura de Bukele ha despertado un fuerte apoyo en Latinoamérica, donde líderes con políticas similares a menudo obtienen respaldo popular en contextos de inseguridad y criminalidad.

Su enfoque radical ha capturado la atención no solo en su país, sino también en la región, donde la seguridad y el orden son prioridades para muchas naciones.