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EL SALVADOR ANTE EL LAVADO DE DINERO Y CORRUPCIÓN – EDICIÓN #93
Por: Roberto Carbajal, docente Investigador de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Francisco Gavidia.
El Salvador ocupa la posición 107 en el Centro Internacional para la Recuperación de Activos (ICAR) perteneciente al Instituto Basilea sobre Gobernanza, el cual, ha detallado el Índice sobre riesgos de lavado de dinero que evalúa los niveles de riesgo de los países en relación al lavado de dinero y al financiamiento del terrorismo, esta calificación incluye 144 países.
La actual Ley de Lavado de dinero fue creada en 1988, pero se propone una nueva ley de acuerdo con la realidad que vivimos, esta favorecería en las investigaciones que se llevan a cabo en otros escenarios, daría más y mejores herramientas legales a la FGR para procesar a las estructuras implicadas en casos de corrupción y peculado.
Esta nueva ley especial para la Prevención, Control y Sanción de Lavado de Activos tendrá en supervisión a ciertos grupos que actualmente no tienen ninguna inspección como profesionales del derecho y notarios, comerciantes de metales preciosos y casas de préstamo los cuales no han tenido ningún proceso sancionatorio. También se incluye a los Institutos Políticos, aún, cuando la ley les obliga a dar a conocer de donde provienen estos fondos, no lo hacen fácilmente. Otro sector son las entidades bancarias que pueden realizarse operaciones sospechosas.
Lo cierto que cada vez más, se desea corregir, tener mayor control, en cuanto a acciones que en general no deberían suceder, ya que un acto de corrupción que falte a la moral y a la ética los cuales son patrones morales universales y que definen el ideal de la sociedad humana, según Platón, daña a la persona y a la sociedad.
Platón basa la ética sobre los pilares de la felicidad, la virtud y el alma para sacar conclusiones éticas. Sin embargo, hoy en día, vivimos en una sociedad donde la ambición de poder y acumulación de riquezas nos lleva a faltar a la ética y la moral lo que nos impide lograr la felicidad que propone Platón. Hemos llegado a una descomposición social y crisis de valores que todos estos casos no nos sorprenden y hasta los vemos normales, 10 muertos por día son un número habitual.
La Educación Familiar ha decaído tanto que ha influido en la pérdida de valores, ya no se inculcan normas y valores que van formando al ser humano desde sus inicios los cuales son un punto de inicio en la personalidad de todos. El respeto, la solidaridad, la sinceridad, la empatía entre otros han perdido forma y significado en nuestra sociedad hasta el grado que hoy en día vivimos de acuerdo a nuestros propios intereses particulares.
Si no fortalecemos la educación familiar en la formación de seres humanos con virtudes, quienes actúen con criterio ético, y lo que entendemos por bien, el cual según Sabater: es lo que se ajusta a lo exigido o satisface valoraciones como la verdad, la justicia, el orden, la armonía. Pero al calificar algo como bien, lo hacemos desde nuestra propia creencia y valoración. Podrá ser bien para un individuo favorecer su bienestar a través de la posesión de bienes que no le pertenecen; sin embargo, afecta el bienestar de los demás que sus acciones no favorecen a lo comunitario entendido como lo que beneficia a la comunidad.