Economía
Remesas familiares mantienen tendencia anual al alza
Según el Banco Central de Reserva (BCR), las remesas durante el primer trimestre alcanzaron $1,912.7 millones durante el primer trimestre de 2023, lo que representa un aumento del 4,8 % en comparación con el mismo período del año anterior.
Durante los primeros tres meses de 2022, El Salvador recibió $1,824.3 millones en remesas. El número de operaciones también aumentó un 4,5 %, de 5,6 millones en 2022 a 5,8 millones en 2023. A pesar de que el ingreso por remesas ha disminuido en los últimos meses, en 2022 se registró una cifra récord de $7,818.5 millones en concepto de remesas.
El mes de marzo se recibieron $712.5 millones. Sin embargo, el crecimiento de las remesas en los primeros meses del año se ha desacelerado en comparación con los años anteriores, con un crecimiento del 4.8% en 2023 en comparación con el 6.4% en 2022 y el 31.1% en 2021 debido a la recuperación económica post-pandemia, según información del BCR.
Tanto las remesas como el turismo fueron motores clave de la economía salvadoreña en 2022, según el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Estados Unidos sigue siendo el principal país emisor de remesas a El Salvador, habiendo representado el 93,3 % de los $1,785.3 millones recibidos durante el primer trimestre de 2023. Canadá contribuyó con el 16 % y España con el 9 % del total de remesas recibidas en el mismo período. Italia, Reino Unido, México, Australia, Guatemala, Panamá y Honduras también figuran en la lista de países que envían remesas a El Salvador.
El departamento de San Salvador recibió el 20,7 % de todas las remesas que ingresaron al país durante el primer trimestre de 2023, mientras que San Miguel y La Libertad recibieron el 11,3 % y el 8,1 %, respectivamente. Sin embargo, Chalatenango fue el departamento con el promedio más alto de remesas por hogar, con $411.50, seguido de cerca por Cabañas, con un promedio de $394.50.
Según el BCR, las remesas han mejorado la calidad de vida del 49 % de los hogares que las reciben. El 51,3 % de los hogares que reciben remesas tienen ingresos inferiores al salario mínimo, mientras que el 25,2 % tiene ingresos entre uno y dos salarios y el 21,7 % reportó más de dos salarios. Además, el 19,8 % de los hogares receptores no tiene ningún nivel de educación, el 67,1 % tiene educación primaria y secundaria, y el 7,8 % tiene estudios universitarios.