Judicial
Presentan dictamen de acusación por la masacre de la UCA
En el Juzgado Segundo de Instrucción de San Salvador, la Fiscalía General de la República presentó ayer el dictamen de acusación por la masacre de seis sacerdotes jesuitas y dos colaboradoras, ocurrida el 16 de noviembre de 1989 en la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas. El expresidente de la República, Alfredo Cristiani Burkard, y al menos siete personas más, fueron incluidas como acusados en el caso.
El fiscal encargado del caso afirmó en un video de Twitter que cuentan con testigos que señalan la presencia del presidente Cristiani en el Estado Mayor, donde fue informado sobre el operativo que incluía el allanamiento de las instalaciones de la UCA. Además, se mencionó una declaración del expresidente en la que afirma haber estado presente en el Estado Mayor durante la noche y madrugada de la masacre.
Durante la fase de instrucción, el juzgado y las partes procesales han escuchado declaraciones anticipadas de testigos clave, incluyendo al coronel Guillermos Benavides, quien ya fue condenado a 30 años de prisión por su participación en este caso. Uno de los fiscales enfatizó que no solo cuentan con el testimonio de un testigo fallecido, Emilio Ponce, sino también con otros testigos que ubican al expresidente Cristiani en el lugar y afirman que estuvo de acuerdo o autorizó los hechos que llevaron a las muertes.
Además de Cristiani, la lista de acusados incluye al exdiputado Rodolfo Parker, quien supuestamente manipuló pruebas y ofreció dinero a cambio de encubrir a los autores intelectuales. Estas acusaciones fueron hechas por el testigo «Gabriel» recientemente.
La masacre de la UCA ocurrió durante el conflicto armado y resultó en la muerte de cinco sacerdotes jesuitas, un salvadoreño y dos colaboradoras.