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Oportunidades en materia tributaria ante la reestructuración municipal
Autor: Pedro Cañas | Director Tax & Legal | Grant Thornton El Salvador
Con la entrada en vigor de la Ley Especial para la Reestructuración Municipal y la reducción de jurisdicciones municipales, se ha presentado la oportunidad de implementar cambios tributarios que permitan optimizar la recaudación de las administraciones municipales y facilitar el cumplimiento de obligaciones por parte de los contribuyentes.
El Decreto Legislativo 762 que contiene la Ley Especial para la Reestructuración Municipal, implementa cambios estructurales en el sistema administrativo municipal, buscando fortalecer la autonomía y la capacidad de gestión de los municipios, sin embargo, entre estos cambios, aún está pendiente tomar en cuenta algunos aspectos fiscales relacionados con la gestión municipal.
La legislación tributaria municipal salvadoreña está compuesta por una variedad de Leyes y ordenanzas creadas por cada municipalidad para la imposición de diferentes tributos, encaminados a gravar ciertas actividades realizadas dentro del municipio, como son los impuestos a la actividad económica, tasas por licencias de funcionamiento o uso de espacio público, entre otros; lo cual genera que los contribuyentes tengan que verificar el cumplimiento de obligaciones específicas en razón de las diferentes jurisdicciones en donde operan, situación que genera disparidades en la aplicación de normas e imposición de requisitos para cumplimiento, mismos que han tomado relevancia con la aplicación de la Ley de Reestructuración, pues ello conlleva a una derogatoria de normativas locales.
Ante estas disparidades, surge la necesidad de armonizar la legislación tributaria municipal y, con más incidencia, los criterios de aplicación de esta, que si bien plantea desafíos, puede generar beneficios tanto para los contribuyentes como para las propias municipalidades, entre las cuales se pueden mencionar:
Eliminación de disparidades fiscales
Una de las principales razones por las que es necesario uniformar la legislación tributaria municipal, es la eliminación de las disparidades fiscales existentes entre las municipalidades, pues actualmente existen muchas diferencias tributarias entre municipios que genera incertidumbre y complejidad para los contribuyentes.
Si bien cada municipalidad tiene la capacidad de establecer sus propios tributos y regulaciones, la gran cantidad de municipios y normas emitidas son los generadores de diferencias significativas en las tasas impositivas y los requisitos administrativos que se deben verificar para cumplimientos de obligaciones formales. Ante la reducción de municipios y la búsqueda de una armonización normativa, se permitiría una distribución más equitativa de la carga fiscal, uniformidad de trámites y una mayor certeza para los contribuyentes.
Simplificación contributiva
La concordancia de la legislación tributaria municipal también simplificaría el cumplimiento de las obligaciones sustantivas y formales para los contribuyentes, eliminando barreras burocráticas y permitiendo la unificación de criterios. En la actualidad, los contribuyentes que operan por medio de sus negocios en diferentes municipalidades, deben lidiar con una variedad de impuestos y procedimientos administrativos que, en algunas ocasiones, a pesar de tener el mismo propósito, difieren entre sí; lo que aumenta la complejidad y el costo de cumplimiento. Una legislación tributaria armonizada o actualizar la Ley General Tributaria Municipal vigente, facilitaría el proceso de cumplimiento, al establecer reglas y procedimientos uniformes en todo el país, sin perder la autonomía municipal con la que gozan las distintas jurisdicciones.
Eficiencia en la recaudación
La unificación de criterios para aplicar la legislación tributaria municipal también tiene el potencial de mejorar la eficiencia de la recaudación de impuestos. Al tener un marco normativo consistente en todo el país, se simplificaría la administración y fiscalización tributaria por parte de las municipalidades. Esto permitiría una mejor asignación de recursos y esfuerzos para verificar cumplimientos y aumentar la recaudación de manera más efectiva, sin vulnerar derechos de los contribuyentes al aplicar criterios dispares.
Transparencia
Una estandarización también promovería mayor transparencia y rendición de cuentas en la gestión de los recursos públicos. Al tener reglas y procedimientos tributarios municipales uniformes, se facilitaría la supervisión y auditoría a las municipalidades por parte de la Corte de Cuentas de la República, fortaleciendo la confianza de los contribuyentes, al asegurar que los recursos recaudados se utilicen de manera eficiente y se destinen adecuadamente a proyectos de desarrollo local.
Estímulo para la inversión
La armonización tributaria puede servir como un estímulo para la inversión y el crecimiento económico local. Al reducir la incertidumbre, burocracia y simplificar el cumplimiento tributario, se brinda un entorno más favorable para que las empresas operen y realicen inversiones dentro de los municipios. Esto puede atraer nuevas inversiones, promover el emprendimiento y estimular la creación de empleo, lo que a su vez contribuiría al desarrollo económico a nivel local y nacional.
En conclusión, la Ley Especial para la Reestructuración Municipal puede ser la base para que las nuevas jurisdicciones puedan buscar acuerdos e implementar una modernización y fortalecimiento de la legislación tributaria municipal, sin embargo, este proceso requiere una cooperación estrecha entre las municipalidades, el gobierno central y otros actores relevantes, con el objetivo de establecer un marco normativo consistente y equitativo en todo el país. Al lograr una mayor armonización, el país podrá fortalecer su sistema tributario municipal y aprovechar los beneficios asociados a un entorno fiscal más justo, eficiente y propicio para el desarrollo.