Economía
Moody’s mejora la calificación de riesgo de El Salvador tras recompra de bonos
La agencia eleva dos posiciones la calificación soberana del país centroamericano y destaca la disminución de riesgos crediticios y una perspectiva estable
La agencia Moody’s mejoró la calificación de riesgo de El Salvador, subiéndola de Caa3 a Caa1, mientras mantenía una perspectiva estable tras la reciente recompra de bonos por parte del gobierno salvadoreño.
La mejora refleja una disminución significativa de los riesgos crediticios, indicando una menor probabilidad de episodios de estrés de liquidez en el corto plazo.
En su comunicado, Moody’s señaló que las operaciones de gestión del pasivo, incluyendo la recompra de deuda realizada en abril de 2024, han reducido notablemente las amortizaciones de deuda externa hasta 2027.
El gobierno ha logrado extender el perfil de vencimientos de su deuda interna, disminuyendo su dependencia de instrumentos a corto plazo mediante la emisión de notas de mayor plazo a bancos locales. Esto, junto con déficits fiscales moderados y relativamente estables, ha reducido las necesidades generales de financiamiento del gobierno.
A pesar de estos avances, Moody’s enfatizó que El Salvador aún enfrenta desafíos significativos, incluyendo instituciones y gobernanza débiles, y una alta susceptibilidad al riesgo de eventos debido al acceso limitado del gobierno a financiamiento transfronterizo. En abril, el gobierno salvadoreño aceptó la compra anticipada de bonos con vencimiento en 2025, 2027 y 2029 por un total de $469.9 millones. Para enero de 2025, el gobierno solo deberá pagar $99 millones.
No obstante, Moody’s subraya que la calificación Caa1 todavía refleja importantes desafíos, como el limitado acceso a financiamiento externo y una exposición elevada a la deuda pública por parte de los bancos locales.
Moody’s también destacó que la capacidad de financiamiento del gobierno salvadoreño sigue siendo limitada, aunque las necesidades de financiamiento están proyectadas a disminuir en los próximos años debido a una combinación de reperfilamiento de deuda y condiciones económicas más favorables.