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Gobierno corporativo, transparencia e integridad
Un buen Gobierno Corporativo será siempre el engranaje esencial para el desarrollo de cualquier compañía, ya sea esta pequeña, mediana o grande. Sin embargo, para que pueda funcionar será necesario siempre poseer y cumplir un código de ética y transparencia fortalecido, basado en las buenas prácticas y los buenos principios.
Escrito por: Iván Ortega Gurdían | Máster en Derecho Corporativo y Bancario | Docente Universitario | Socio Director, Gurdian & Asociados.
Estoy seguro de que más de una vez has pasado por una calle llena de altos rascacielos y te has preguntado: ¿Cómo se manejan esas imponentes compañías para ser exitosas? Si estás interesado en saber la respuesta, te invito a leer el presente artículo.
Antes de abordar el tema principal, es necesario hacer hincapié en uno de los factores más importantes e influyentes en el mundo de los negocios, como lo es la globalización, pues esta ha obligado a que las empresas se adapten a las demandas de un mercado internacional cada vez más exigente y cambiante, el cual además abarca una gran diversidad cultural.
Con los avances tecnológicos actuales, el mundo pareciera encogerse cada día más, ya que las distancias físicas van desapareciendo, viviendo en un mundo cada vez más conectado, el cual nos ofrece una infinidad de opciones para establecer contactos con otras personas, lo que ha cambiado significativamente el panorama empresarial.
Hoy en día, es imposible imaginar un negocio que no integre y se constituya sin el apoyo de las nuevas tecnologías; no sólo en cuanto a las comunicaciones, sino también en relación con las estrategias de marketing, recursos humanos, atención al cliente, operaciones, legal o finanzas, pues todas las áreas de la empresa tienen que estar comprometidas con los avances y las nuevas herramientas tecnológicas que se desarrollan constantemente, para poder tener una sinergia positiva en el andar diario de los negocios.
Sin embargo, aunque las nuevas tecnologías tengan un rol esencial, todo negocio se fundamenta en la interacción entre individuos y no hay que olvidar que detrás de la dirección de una máquina, esta una o varias personas, por ende, debe haber una buena comunicación, no solamente entre los colaboradores de la empresa, sino también con los proveedores, clientes, inversionistas, directores y accionistas.
Podrás estarte preguntando, ¿qué tiene que ver todo esto con el Gobierno Corporativo?, para entender un poco más, debemos conocer su noción e importancia, y para ello, te invito a seguir leyendo.
El Gobierno Corporativo es el conjunto de normas, principios y procedimientos que regulan la estructura y el funcionamiento de los órganos de gobierno de una empresa. Es la división de responsabilidades y decisiones estratégicas de manera equivalente entre integrantes de Junta General de Accionistas, Consejo de Administración, Alta Dirección y Comités, es decir, que cada órgano que integra el gobierno corporativo debe tener el mismo nivel de independencia y autoridad en los procesos que dirigen una compañía, con el fin de permitir una mayor transparencia y en consecuencia, un control interno más organizado, desarrollando de esta manera una administración adecuada.
En los últimos años, en Latinoamérica, se ha venido promoviendo por parte de los Gobiernos de algunos país y organismos internacionales, el fortalecimiento de políticas internas en las empresas, implementando rigurosas normativas de control y administración, como la de prevención de lavado de activos y financiamiento al terrorismo, o bien, las prácticas antisoborno, estas dos solo para dar un ejemplo, pues también se han creado códigos de conducta, procedimientos internos para la igualdad de género, ética profesional, entre otros.
Como dije anteriormente, la globalización y la diversidad cultural en el mercado mundial ha sido uno de los factores más influyentes para la implementación y/o la inclusión de nuevas políticas institucionales, para competir y ganar mayor terreno en los negocios, tanto nacionales como internacionales.
Sin embargo, en ocasiones, algunas empresas apenas cumplen con los requerimientos mínimos legales establecidos en sus políticas, reportando solo lo necesario, con el fin de obtener mayores ganancias y lograr expandirse a más territorios, y es muy común ver que las tomas de decisiones se centralizan en una sola persona, o bien, en comités muy selectivos.
Estas restringidas “cadenas de mando”, al final de cuentas lo que causan son “cuellos de botella” a la hora de resolver algún asunto, causando, en la mayoría de los casos, el efecto de la bola de nieve, ya que cada vez se suman más y más asuntos pendientes, terminando, siendo todos urgentes; saturando, entorpeciendo y dilatando el caminar diario del negocio.
En lo personal, la globalización y la diversidad cultural, no deberían ser una amenaza para las empresas, al contrario, deberían ser consideradas como una gran oportunidad de crecimiento, ya que las distintas experiencias y formas de pensar son claves para obtener mejores resultados en la toma de decisiones.
Por lo anterior, puedo decir que el punto primordial debe radicar no solo en la creación de políticas internas efectivas y eficaces, en las cuales se implemente un Gobierno Corporativo bien definido y funcional, sino que sobre todas las cosas, deben prevalecer los principios éticos y la transparencia profesional en cada colaborador para que juntos sean capaces de respetar, delegar y mantener la comunicación entre las áreas involucradas, trabajando unidos para conseguir resultados en pro de los intereses y beneficios de la empresa.
Considero también importante hacer mención, que no es tan relevante si es una empresa familiar recién constituida o una corporación de imperiosos rascacielos, en cualquiera de los escenarios, un buen Gobierno Corporativo será siempre el engranaje esencial para el desarrollo de cualquier compañía, ya sea esta pequeña, mediana o grande. Sin embargo, para que pueda funcionar será necesario siempre poseer y cumplir un código de ética y transparencia fortalecido, basado en las buenas prácticas y los buenos principios.
Para finalizar, es fundamental mantener siempre presente que la base de todo negocio es la confianza, y una empresa es confiable por su imagen y reputación. Por lo tanto, la integridad corporativa y la transparencia y ética ejecutiva, tanto individual como colectiva, son claves esenciales para alcanzar el éxito deseado, y esto debe aplicarse en todos los niveles de la corporación, comenzando por el accionista mayoritario, pues son todos los individuos que forman parte de la empresa en su totalidad, quienes crean y defienden el nombre y el prestigio de una empresa.