Economía
El Salvador y el FMI ultiman acuerdo por $1,400 millones que haría del bitcoin una moneda de uso voluntario
El acuerdo que está por concretarse entre el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el gobierno de El Salvador permitiría al país obtener un financiamiento de $1,400 millones, a cambio de hacer del bitcoin una moneda de uso voluntario, según reveló el medio estadounidense Financial Times.
De acuerdo con dos fuentes cercanas a las negociaciones, el pacto entre ambas partes podría cerrarse en las próximas 2 o 2 semanas.
Desde que El Salvador adoptó el bitcoin como moneda de curso legal en 2021, las conversaciones con el FMI han estado marcadas por dificultades, debido a las preocupaciones del Fondo sobre los riesgos que representa la criptomoneda para la estabilidad macroeconómica y el sistema financiero del país.
A pesar de que el bitcoin sigue siendo considerado moneda de curso legal, el gobierno salvadoreño, se comprometió en octubre de 2023 a buscar un acuerdo con el FMI después de las elecciones programadas para principios de 2024.
En ese contexto, el ministro de Hacienda, Jerson Posada, afirmó que el país estaba cerca de llegar a un acuerdo con el organismo internacional.
El Financial Times destacó que, en el marco del acuerdo, El Salvador aceptaría eliminar el requisito legal que obliga a las empresas a aceptar pagos en bitcoin.
Así, el uso de la criptomoneda pasaría a ser voluntario, una medida que podría aliviar las tensiones con el FMI, que ha manifestado su preocupación por la obligatoriedad del bitcoin en las transacciones comerciales.
El acuerdo también contempla una serie de compromisos por parte del gobierno salvadoreño, que incluirían reducir el déficit presupuestario del país, actualmente en 3.5 % del Producto Interno Bruto (PIB), durante los próximos tres años.
Esto implicaría un recorte en el gasto público, un aumento de los impuestos, la aprobación de una ley anticorrupción y un incremento de las reservas internacionales del país hasta alcanzar los $15,000 millones.
Con este acuerdo, El Salvador buscaría garantizar su estabilidad económica y asegurar el apoyo del FMI, mientras ajusta su política fiscal y monetaria en línea con las expectativas internacionales.