ABANSA señala que banca ha soportado la crisis económica

La Asociación Bancaria Salvadoreña (Abansa) presentó los resultados del análisis de los principales indicadores de la banca en el primer trimestre del 2020. Según datos del sector, hasta el 30 de abril, se reporta crecimiento tanto en la cartera de depósitos como en la de créditos.

Raúl Cardenal, presidente de Abansa, explicó “la tasa de crecimiento interanual del saldo de crédito no solo sigue creciendo, sino que ha empezado a acelerar el crecimiento, en contraste con esta situación general de la economía”.

Según el informe la banca salvadoreña ha soportado de buena manera los primeros meses de la crisis económica derivada de la pandemia del COVID-19.

«El sistema financiero continúa creciendo, a tasas bastante positivas. Hemos logrado hacerle frente a la crisis de salud de esta pandemia», planteó Cardenal.

“La liquidez de los bancos se ha mantenido. Vemos que la banca esta bien preparada, aunque no esperábamos esta crisis, a todos nos tomó por sorpresa (…) Se encontraba en buen momento de solvencia para hacer frente a esta emergencia”, sumó Cardenal.

De acuerdo con el informe de Abansa, la cartera de préstamos de la banca alcanzó $13,475 millones al cierre de abril, una cifra equivalente al 51 % del Producto Interno Bruto (PIB), es decir la producción total del país, esto representa un aumentó del 5.8 % anual.

El 47 % de estos préstamos ha sido otorgado a empresas (principalmente comercio, industria y servicios).

Según ABANSA este crecimiento es impulsado por el crédito a empresas que aumentó 8.6 %, llegando a $6,387 millones, mientras que el de personas y vivienda tuvieron mejoras de 3.6 % y 3 %, representando $4,537 y  $2,546 millones respectivamente.

También destaca que las fuentes de fondos bancarias crecieron 10.2 % en el período y alcanzaron los $17,347 millones.

Los depósitos, una de las principales fuentes de fondeo de la banca, también han crecido. Hasta abril, sumaron $14,467 millones, un alza del 12.7% comparado a 2019. Este aumento se observó en las cuentas corrientes, con $542 millones más, y en las cuentas de ahorro con $736 millones adicionales, sobre todo por parte de empresas y personas naturales.